Familias y Parejas

Mediación Familiar

Como mediador familiar animo a las partes a establecer la comunicación, a veces perdida, para que éstas busquen de manera conjunta soluciones justas para todos sus miembros y las que mejor se adaptan a su situación concreta.

Los conflictos y disputas en pareja y familia conllevan una alta carga de estrés. La separación es una experiencia dolorosa y emocional. La mediación es muy útil para aclarar preguntas sin responder y favorece que durante el proceso de separación las partes implicadas tomen de nuevo las riendas de sus propias vidas y sean capaces de tomar sus decisiones.

La mediación puede tener lugar tanto antes de la separación como durante o después del procedimiento judicial.

En caso de haber menores por medio, es sumamente importante tener en cuenta las necesidades y los intereses de los hijos en la mediación familiar y seguir cooperando como padres a pesar del fin de la relación en pareja. Como mediadora familiar es para mi primordial poner el centro de atención en el interés y bienestar de los menores durante el proceso de mediación.


Parejas binacionales

La atracción que las parejas sienten el uno por el otro al comienzo de la relación es mucho más intensa cuando el otro procede de una cultura diferente. Lo que al principio era tan exótico y atractivo puede derivar a menudo en una fuente de conflictos en la vida diaria.

Las diferencias culturales, religiosas y/o sociales parecen haberse agrandado y se crea un abismo entre la pareja, que no siempre es fácil de superar.

A través de la mediación, se aumenta la percepción positiva de las diferencias culturales como aspecto enriquecedor en las relaciones. 

El resultado de este proceso es el desarrollo de un nuevo entendimiento en la pareja y una mejor comunicación basada en el respeto y la aceptación de cada persona como individuo  y de las diferencias como necesarias y beneficiosas para ambos, sin renunciar a la propia identidad. El pilar en el que se apoya la relación se fortalece y los conflictos se minimizan.


Conflictos internacionales que afectan a menores

Estoy especializada en casos de mediación familiar internacional en la que menores se ven envueltos, en especial en secuestro internacional de menores.

Cada año aumentan más los matrimonios internacionales. Igualmente el número de separaciones y divorcios. Cuando una relación en la que hay hijos se acaba, no es extraño que uno de los progenitores desee regresar a su país de origen con los hijos comunes sin pedir permiso al otro progenitor. Normalmente no se es consciente de que este hecho supone una sustracción de menores y que acarrea consecuencias civiles y penales.

Este tipo de casos  entrañan un elevadísimo grado de carga emocional que se acentúa por las diferencias culturales y los diversos comportamientos de los padres, que se hacen visibles por primera vez durante la separación.

La mediación en casos de sustracción transfronteriza de menores la llevo a cabo en Co-Mediación garantizando así la neutralidad en un equipo binacional e interdisciplinar y en virtud de lo dispuesto en el  Convenio de La Haya sobre los Aspectos Civiles de la Sutracción Internacional de Menores, así como en las controversias sobre visitas y custodia.

La mediación asiste a las partes durante el proceso de toma de decisiones y/o antes de la cita en juicio y es una forma útil de aclarar y reestructurar las relaciones familiares y las condiciones futuras entre todos sus miembros.